Martes 15 de julio de 2014
Cracovia es una ciudad preciosa, declarada patrimonio de Humanidad por la UNESCO en 1978. Merece la pena visitarla con detalle.
Tras dormir y desayunar en el Best Western Hotel de Cracovia, que está muy cerca de la ciudad antigua, nuestro primer contacto con una ciudad polaca fue en el antiguo barrio judío. Y digo antiguo, pues por desgracia para la humanidad, los nazis exterminaron o hicieron huir a la mayoría de los judíos que aquí habitaban. Antiguo barrio judio de nombre Kazimiers.
El primer monumento que vemos es la vieja sinagoga. Es la más grande de Cracovia por lo que algunas veces se le conoce como la Gran Sinagoga. Está en la famosa calle Szeroka, en el número 24.
Un detalle: estos días Polonia estaba tan lleno de turistas que es dificilísimo hacer una foto sin un montón de gente. Otra sorpresa es que entre los turistas que nos encontramos mayoritariamente éramos españoles.
En este barrio antes de la Segunda Guerra Mundial vivían 60 000 judíos. Pero no eran unos recién llegados, llevaban allí desde el siglo XIV.
En cuanto los nazis alemanes llegaron a Cracovia hicieron un muro y encerraron a los judíos dentro. Hoy queda muy poco de dicho muro. Posteriormente muchos de los judios de este barrio fueron llevados al cercano campo de exterminio de Auswittz, del que hablaremos más adelante.
También en este barrio están los estos de la famosa fábrica de Schindler, al que hizo famoso Steven Spielberg en su pelicula de 1993 «La Lista de Schindler«. Parte de la película está filmada en este barrio.
Roman Polanski nació en Francia, pero sus padres eran polacos y él pasó dos años en el ghetto de Cracovia, en este barrio que estamos visitando. Su película «El Pianista», en parte es autobiográfica y se refiere a sus vivencias en este lugar. Su madre murió gaseada en Auswitz.
Si nos giramos 180º, lo que vemos es la continuación de la calle Szeroka:
Restaurante Ariel
A la derecha se ve un letrero verde. Es este:
Ariel es un famoso restaurante, como no podía ser de otro modo, en un barrio judío, que quiere recuperar su pasado hay comida kosher; es decir, comida judía. La especialidad de la casa es cuello de ganso relleno de hígado. Lamento que en nuestros planes no estaba comer aquí.
Comida Kosher
Recuerden que la comida kosher está llena de tabúes; el principal es que no se pueden mezclar carne y lácteos. Por ejemplo, se puede comer una hamburguesa de vaca y se puede comer queso, pero no se puede comer una cheesburger pues mezcla la carne con un derivado de la leche: el queso. No es esta la única prohibición que nos resulta extraña. Otra es queno se pueden comer los animales invertebrados, por eso los alimentos que pueden tener gusanos –manzana, lechuga– deben ser lavados cuidadosamente para quitarlos. No se pueden comer animales que no tienen la pezuña partida como el camello o la llama. No pueden comerse los animales que aunque tengan la pezuña partida son rumiantes. cerdo, jabalí… Peces que no tengan aletas o escamas: pez espada, tiburón… y muchas más cosas. Podéis ver una breve introducción aquí:
http://www.conmuchagula.com/2009/10/31/cocina-kosher-todo-sobre-la-cocina-judia/
Seguimos por la calle Szeroka
La calle enfrente es parecida, aunque al fondo, a la izquierda hay un cementerio.
Seguimos estando en la calle Szeroka, en el número 28
Cerca del restaurante Ariel, tenemos la Sinagoga de Popper:
La historia de Helena Rubinstein es interesante. Digamos brevemente que en 1902 emigró a Nueva York y allí empezó a vender los productos de cosmética que le había enseñado a fabricar su abuela.
A la izquierda el mercado:
Vamos a despedirnos del barrio con algunos de los comercios que se ven el la calle szeroka:
Y también hay una comisaria:
Salimos del barrio y vemos un antiguo puente sobre el río Vistula.
El río Vístula ha sido importantísimo en la historia de Polonia y en especial en la ciudad de Cracovia. Gracias a que el río es navegable hasta ella, formó parte de la liga hanseática, de hecho es la ciudad más al sur de dicha liga. Eso le dotó de una gran riqueza comercial, de silos, muelles, barcos,…
Más datos sobre la liga Hanseática: aquí.
A través del río Dniéper se podía llegar hasta el mar Negro y ese conjunto de vías fluviales se conoce ruta del ámbar, debido a que esta resina, abundante en el Báĺtico, iba hasta Asía, Libia y Egipto a través de ella.
* * *
Nota fotos y texto. Salvo las fotos que tienen un agradecimiento específico, como por ejemplo Wikipedia, son nuestras y las licenciamos con
Félix Ares y Maricarmen Garmendia is licensed under a Creative Commons Reconocimiento 3.0 Unported License.
Creado a partir de la obra en viajes.ares.fm.
Contacto con nosotros: