Lunes, 15 de abril de 2013
El desayuno para madrugadores me pilla al amanecer y el intenso color azul del mar Tirreno me llama poderosamente la atención. Hay un color para coches que se llama Azul Tirreno, nunca había entendido el nombre hasta hoy. Hasta este desayuno con unos colores de mar espectaculares.
También me sorprendió la calma del mar, casi un espejo si no fuera por las olas que deja nuestro propio buque. Un espejo de un azul intenso surcado por ríos de color más claro.
A estas horas el personal de limpieza aprovecha para limpiar cubiertas y cristales. Las mangueras dejan gotas de agua en los cristales. No es lluvia, pero lo parece:
Una vez más, el Sol, al fondo me recuerda al ojo de Ra
En su día, para conseguir fotos con destellos utilizaba los filtros creativos, concretamente filtros Cokin, pero no los he traído. Estas fotos son sin filtros, los destellos se producen en el borde los cristales biselados del barco.
RÍOS DE ARENA
A veces el mar nos sorprende con «ríos» de un azul claro que surcan el azul oscuro.
Siempre me han intrigado esas bandas de color claro. Parece como si un barco hubiera pasado por allí y hubiera dejado su estela, pero ¿por qué la estela es de color más claro?
¿Por qué hay tantas estelas? ¿Por qué algunas se bifurcan?
Ríos, estelas…
A lo largo de este viaje, con el café de madrugadores en la mano, me he preguntado por la razón de ese cambio de color, por las razones de esos ríos de color claro, que tan bien se ven aquí, en el mar Tirreno.
La razón parece estribar en la arena en suspensión en el agua. Supongamos que el mar no es muy profundo –este es el caso pues estamos muy cerca de la costa– y pasa un barco. La hélice remueve la arena del fondo que se queda en suspensión en el agua. Como en este caso la arena es blanquecina la estela es de color blanco. la arena suspendida queda así muchas horas.
Pero no solo son los barcos, también son los ríos y las corrientes. Los ríos arrastran arena, cuando penetran en el mar dejan su arena flotando, arena que produce caminos blancos. Las corrientes marinas remueven el fondo y lanzan las partículas claras a la superficie.
A la hora del desayuno normal –no el de madrugadores– llegábamos al puerto de Civitavecchia, puerto de cruceros de Roma:
Nota fotos, texto y vídeo. Salvo las fotos que tienen un agradecimiento específico, como por ejemplo Wikipedia, son nuestras y las licenciamos con
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