Domingo 17 de marzo de 2013
En nuestro camino desde las torres Petronas hasta el Museo Nacional pasamos por algunos interesantes edificios, como muestra esta foto:
La entrada al Museo es un bonito arco:
En el museo hay un poco de todo, desde la más remota prehistoria hasta los trenes que circulaban hasta hace poco por el país.
En el museo hay varias galerías. La primera a la que entré fue a la de «Early history». Allí había cosas de la prehistoria de Malasia. No entiendo muy bien el título de la galería.
En Malasia también hubo megalitos y se muestras reproducciones a escala de los mismos.
También hay un espacio dedicado a la edad del hierro y a la edad de bronce
Hay espacios dedicados al neolítico.
También hay unas vitrinas dedicadas a comparar los cráneos humanos con los de distintos primates.
Un tema que a mí me gustó mucho fue un vídeo en el que se mostraba el nivel del mar en distintas épocas y de ese modo mostrar las partes que hoy están bajo el mar que eran habitables y los caminos para pasar a las islas de Java, Sumatra,…
También hay una galería dedicada a la época colonial, otro a la actual, etc. Pero el tiempo se nos acababa y tuvimos que irnos. Una lástima. Es un museo que merece mucho más tiempo.
La conclusión a la que llegué tras esta visita es que la vuelta al mundo en barco en cien días tan solo sirve de aperitivo para degustar un poco las distintas civilizaciones, para profundizar aunque solo sea ligeramente se necesita mucho más tiempo, Muchos más días en cada puerto. En fin, tendremos que pensar en ir a ciertos sitios de otra manera.