Jueves 3 de noviembre de 2016

Salimos de Fuengirola en autobús muy pronto con destino al sur de Portugal, concretamente vamos al pueblo costero de Olhos de Água, una parroquia de Albufeira.

Paramos a desayunar en un hotel-restaurante de carretera del municipio sevillano de Paradas.

Se trata de un hostal de carretera que dispone de un gran comedor donde dar comidas y desayunos a grupos como era nuestro caso.

Este es el aspecto de la barra:

Ahora al ver las papeleras me da un poquito de asco. En Fuengirola han logrado que no haya papeles en los suelos sin necesidad de acudir a lo de las papeleras. No sé que me da más asco si comer con los papeles por el suelo o con ellos a mi lado en unas horribles papeleras. ¿Aprenderemos alguna vez que los restos se dejan en l plato para que los retire el camarero y los mande a la basura?

Enfrente de la barra hay unas mesas para poderse sentar:

También hay un comedor, que fue al que nosotros fuimos. Su aspecto del comedor es este:

Nuestro desayuno fue el típico andaluz. La tostada de pan con su aceite de oliva y también mermeladas… y el café servido en vaso, no en taza.

Nunca he entendido lo del café en vaso. Fundamentalmente es que te quemas, por eso se inventaron las tazas con asa. Pero hay muchas personas que dicen que sabe mucho mejor en vaso. No lo entiendo, pero ya se sabe que sobre gustos…

Un aspecto fundamental de un viaje largo es encontrar unos servicios limpios. Aquí los encontramos.

Para los propósitos de nuestro viaje el precio de las habitaciones no nos importaba, pero quizá, para otros viajeros, les pueda interesar.

Continuamos viaje y pasamos por Sevilla. Pero me fue imposible sacar ninguna foto decente desde el autobús.

Poco después pasamos por lo que creo que es San Juan de Aznalfarache y vemos su iglesias de Nuestra Señora de Loreto.

Seguimos avanzando, cruzamos la frontera portuguesa y llegamos a nuestro hotel el Olhos de Água: Apartamentos turísticos Clube Humbria.

Llegamos a la hora de comer; así que lo primero que hicimos fue ir al comedor, con buffet libre, donde comimos.

Comimos con nuestro buen amigo Pepe:

Después subimos a los apartamentos. Y nos encontramos con que eran muy amplios, con dos habitaciones más un cuarto de baño. Para nuestro gusto muy bueno.

Después nos dedicamos a recorrer la zona, conocer el hotel, tomar unos cócteles, puesto que teníamos «full credit», etc. Pero de todo ello hablaremos en las siguientes entradas.

+*+