Jueves, 28 de marzo de 2013
Tal como ya hemos mencionado en el contrato de la vuelta al mundo que firmamos con Costa se incluía una «Visita a la ciudad de3 Bombay». A nosotros nos tocó el segundo día de estancia en Mumbai. Tal como ya han visto en el post anterior aprovechamos el primer día para ir a ver las cuevas de Elefanta, que, reiteramos, es razón suficiente para visitar Mumbay; pero el segundo día fuimos a ver la ciudad.
Desde el puerto un autobús nos llevó por las calles de Mumbay hasta llegar a la estación Victoria. Mejor dicho, la estación Chhapati Shivaji Maharaj, que es el nombre actual, aunque la mayor parte de la gente sigue llamándola Estación Victoria. Es un magnífico edificio de estilo Victoriano, del que antes salían los trenes. El primer tren salió en 1853. Hoy en día sigue siendo un edificio extraordinario. Lástima que las condiciones de luz y el poco tiempo que nos concedieron no nos permitieran sacar mejores fotos.
A continuación paseamos por el paseo marítimo con destino al parque Kamla Nehru.
Parque Kamala Nehru
Dentro del parque hay setos que han podado con figuras de animales:
El parque es bonito, tranquilo… con sus caminos de tierra roja.
En sus cielos vuelan las aves.
Aves que quizá busquen las «Torres del silencio» en las que la importante población «Parsi» depositan a su muertos para que los buitres coman sus carnes. Lamentablemente ya casi no quedan buitres en Mumbai. Los turistas no podemos visitar las «Torres del silencio». La guia nos señaló en silencioso parque en el que están ubicadas. Parece ser que la falta de buitres hoy en día se combate con una incineración con gas…
Acudimos a los textos antiguos para ver cómo eran estas «torres del silencio».
LA LAVANDERÍA DE MUMBAY
El timo de las «cerámicas lavadoras»
Tras visitar el parque y pasar al lado de las «Torres del silencio» nos dirigimos hacia el barrio donde está una enorme lavandería; la más grande de Mumbay, que sigue funcionando a pesar de las modernas lavadoras eléctricas. Se trata de una lavandería tradicional donde limpian las sábanas, manteles, servilletas y otras cosas de muchos hoteles. El sistema de limpiado es el tradicional; es decir, fundamentalmente mojar la tela y golpearla y después dejarla secar al sol. Nuestra cultura está muy acostumbrada al uso de jabones para limpiar, no obstante el agua, simplemente agua y el golpeo es un sistema de lavado excelente. Algo así, está detrás de los que venden «cerámicas» maravillosas para lavar sin jabón. La cerámica no hace nada, pero una lavadora actual usa agua caliente –que es un elemento limpiador de primera– y golpea la ropa: la ropa sube y cae, lo que elimina las grasas. Los que han caído en las trampas de las «cerámicas» han experimentado –pagando a precio de oro– que simplemente agua y golpeo limpian muy bien la ropa. Eso no quiere decir que los detergentes no sirvan para nada, lo que no es cierto. Los detergentes eliminan las grandes manchas, las manchas profundas… Lo que si nos dice esta lavandería es que las «cerámicas» son sencillamente una falacia.
El contraste entre el Mumbay de los grandes rascacielos y el de las lavanderías tradicionales es brutal.
CASA-MUSEO de MAHATMA GANDHI
Continuamos nuestro viaje en autobús hacia la casa-museo de Mahatman Gandhi:
En India se reconoce a Mahatma Gandhi como el impulsor de la independencia de India. En todas partes se le estima como el iniciador de la «resistencia pacífica». De los movimientos populares que tratan de cambiar las cosas sin violencia, la desobediencia civil, etc., etc.
Al ver estos archivadores metálicos he sentido cierta nostalgia. Ahora todo se hace por internet, pero con archivadores similares he descubierto grandes cosas en la Biblioteca Nacional de España, en la Hemeroteca y en la biblioteca de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Telecomunicación. Todavía recuerdo con añoranza mi búsqueda en la biblioteca de Telecos sobre fibras ópticas y descubrir los cristales de Murano y los mirafiori. Espigas de trigo que se iluminaban al darles la luz en las raíces… Fue mi primer artículo divulgación científica. ¡Qué tiempos aquellos!
Además en el edificio hay muchos trípticos –la verdad es que no sé cómo llamarlos–: figuras en miniatura con escenas de la vida de Gandhi.
Fuera del edificio nos encontramos con uno e los símbolos más representativos de Gandhi: la máquina de hilar.
A continuación nos volvimos a montar en el autobús y nos fuimos al templo Iskon Girgaum Temple, dedicado a Krisna. Es un templo moderno, construido en 1986, pero que tiene el encanto de los templos hinduistas.
El trabajo en madera es excelente me recuerda mucho al de Katmandu en Nepal.
Este templo en 1992 se integró en la Iskon (International Society For Krishna Consciousness)
La visita fue muy interesante, pero cada día entiendo menos el hinduismo antes creía que era el ejemplo de las religiones politeistas y sin embrago me encuentro con que, si no he entendido mal, solo hay un dios supremo, que tiene tres importantes manifestaciones. Shiva, Brhama y Visnhu, que a su vez se manifiestas –y reencarnan– en miles de formas. Miles de formas significa miles de dioses, pero TODOS son manifestaciones de uno solo. ¿Es, pues, el hinduismo una religión monoteísta? Estoy hecho un lío.
A continuación fuimos «de tiendas». Nada importante que remarcar. Volvimos al barco y partimos para Abhu Dhabi, surcando un mar que tradicionalmente ha estado infestado de piratas y que hoy sigue estándolo, pero del tema «piratas» hablaremos en nuestro próximo post.